Los censos no son exactos porque muchos gitanos no están registrados.
Debido a la dispersión de los gitanos, su cultura y organización varían ampliamente; por eso algunos han adoptado la religión del país en que viven, por ello hay católicos, ortodoxos, protestantes y musulmanes.
Algunos grupos mantienen “el precio de la novia”, pago realizado por la familia del novio. Otra costumbre es que las señoras casadas usen un pañuelo en la cabeza obligatoriamente y que las chicas menores de 15 años usen pantalones largos. Cuando llegan a esa edad tienen que casarse.
El contacto con otro individuo ajeno a su pueblo se considera el principio arriesgado de la pérdida de su identidad.
Las casas donde viven son tipo galpones, donde no hay paredes; no usan camas ni sillas, solo una mesa y se sientan en almohadas y duermen sobre colchones en el suelo. El baño en oro cumple doble función según la superstición: proteger a sus portadores de los malos espíritus; pero en la práctica los protege de la pobreza. El gitano nómade no puede invertir sus ganancias en bienes y raíces y desconfía de las instituciones bancarias; por eso prefiere llevar su riqueza puesta: escondida entre los cabellos o asegurada en la dentadura.
*El gitano es un espíritu libre, anda siempre de un lado a otro y vive de su propio trabajo, jamás va a ser empleado, ni va a hacer aportes jubilatorios porque ve esto como explotación y no lo soporta. algunas tribus no pueden censar, no pagan impuestos y viven su propia ley.
El pueblo gitano nunca reclamó tierra para establecerse, nunca pugnó por convertirse en nación con territorio y bandera.
“Su bandera es LA MUJER y su territorio es EL MUNDO ENTERO”.
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